Reseña: Así Suena “In Solitude… I’ll Watch You Fall”, primer LP de MANTRADestacadaDiscos (Así Suena)Reseñas por Frank Hernández - 23/09/201411/06/2018 Portada de “In Solitude… I’ll Watch You Fall” Banda: MANTRADisco: “In Solitude… I’ll Watch You Fall”País: Venezuela Fecha de publicación: 29 de Septiembre 2014 Hacer un disco en Venezuela ha llegado a ser literalmente un sueño, pero hay quienes no desisten independientemente de lo mucho que pueda costar llevarlo a cabo. Tal es el caso de MANTRA, la banda caraqueña de death metal melódico que tuvo que esperar más de una década para ver realizado ese sueño. Hoy están a punto de publicar “In Solitude… I’ll Watch You Fall”, su primer disco de larga duración en más de 10 años de carrera, y aquí les contaremos cómo suena el sucesor del EP “Long Way To Oblivion”, primera y única producción discográfica de la que disponía la banda hasta ahora.Desconozco en cuanto tiempo se realizó “In Solitude… I’ll Watch You Fall”, pero da la impresión de ser un disco con mucha pre-producción. Desde el orden de las canciones hasta los arreglos, pasando por las letras de los temas, el álbum está muy bien realizado, y es algo que no solo quienes escuchamos el disco de manera crítica notamos, sino que inconscientemente todos vamos a sentirlo, ¿o es que nunca se han preguntado “qué será lo que tiene este disco que no me canso de escucharlo?”. El secreto de un buen álbum no es simplemente que esté conformado por buenas canciones; hacer que tengan sentido al juntarlas y agraden a quien las disfruta una detrás de la otra, sin aburrirse, es un asunto complejo y tiene su ciencia. Tal vez me equivoco y resulta que Renzo, Andrés, Santiago y Rony lanzaron unos dados y así salió el orden de los temas, pero no parece. De cualquier manera, quedó excelentemente compilado.Tema por tema:“Writing In The Sand” es el más suave de “In Solitude… I’ll Watch You Fall”, parece ser un intro que se negó a ser intro. Es el primer track del disco y se trata de una pieza instrumental de casi cuatro minutos, cuyos primeros segundos en piano son el sonido ideal para introducir la serie de doce canciones que conforman este álbum. Con el piano sonando van apareciendo las guitarras, bajo, batería y hasta unos sonidos electrónicos que se hacen notar durante todo el disco, todos van creando la atmósfera que nos prepara para lo que vendrá luego, pero aunque parezca NO es un intro, es un tema que tiene vida propia (verso, coro y final), y le da paso a “Symbolic Moments”. Es aquí donde comienza uno a mover la cabeza, es aquí donde el metal dice presente y no para hasta el final. A partir de este segundo track es donde MANTRA nos recuerda que no hay nada que envidiarle al viejo continente, y es que si cerramos los ojos y nos olvidamos de que quienes tocan esa música son paisanos que luchan por sobrevivir en Venezuela, fácilmente pensaremos que descubrimos una nueva agrupación sueca o finlandesa. Debo aclarar que no lo digo porque en Venezuela no tengamos músicos que destaquen, sino porque no es común que destaquemos en un género como el metal y MANTRA es una de esas bandas comparables con las grandes bandas europeas. Poco a poco vamos demostrando que no todo lo que sea oscuro y pesado viene de los países frios. “Symbolic Moments” comienza con fuerza, con un riff que se te queda pegado en el inconsciente y remata con un coro bastante melódico, en el que los gruñidos de Santiago hacen pareja perfecta con la guía melódica de la guitarra. El solo de guitarra es como una continuación de esa guía continua que se aprecia durante todo el tema, haciéndolo bastante agradable al oído y ese coro que grita “You don’t deserve forgiveness, You don’t deserve absolution” se te queda desde la primera escuchada. Si en Venezuela las radios convencionales colocaran metal en su rotación, yo diría que este podría ser un buen tema promocional. El final con guitarras acústicas en “fade out” le da un toque especial al tema, para dar paso a otro arranque enérgico: “Reflected On Blood”.El tercer track es uno de los más variados rítmicamente hablando, tiene síncopas y cadencias, además de que durante todo el tema juegan con la dinámica dejando escuchar el detalle de los sintetizadores en algunos momentos de “calma”. Incluso ritmos de breakdown parecen percibirse en esta canción, sin ser MANTRA una banda de metalcore. El final es abrupto, así que si te descuidas no notarás donde termina “Reflected On Blood” y comienza “Hate Lay Hidden”.Ésta última es la cuarta canción del álbum y con ella nos vuelven a recordar que son una banda de death metal MELÓDICO, así, en mayúsculas. Sin ser demasiado veloces (es uno de los temas más lentos del disco), en “Hate Lay Hidden” se siente agresividad, odio y decepción (tiene una letra muy social que recomiendo ampliamente). Santiago por momentos grita, por momentos gruñe y las guitarras se dan el lujo de hacer un “stop” en medio del tema para solear en acústico, dándole un aire de “segunda parte” a la canción y regresan con mayor fuerza (modulación incluida) para así finalizar el track en un campanazo.Para el quinto track ya estamos navegando en el centro de este océano musical llamado “In Solitude… I’ll Watch You Fall”, y como suele ocurrir en el centro, las cosas parecen ser más calmadas allí que en la orilla. Casualidad o no, el quinto tema se llama “Away From The Shore” (lejos de la orilla). Al igual que pasa con el tema anterior, ésta es una canción bastante melódica y de inicio suave, que tiene secciones agresivas y otras relajadas. Comienza acelerando progresivamente hasta que aparece en escena la voz, siendo la estrofa en donde se nota mayor velocidad. Solos de guitarra cargados de feeling más que de velocidad es algo que encontramos en “Away From The Shore” y se vuelven una constante durante todo el disco. El blast beat aplastante de Rony en conjunto con los gritos de Santiago, son el indicativo de que comenzó “Rapid Eye Movement”, el sexto tema. A pesar de ser un tema rápido, no se pierde ni por un segundo la esencia melódica que caracteriza a la banda. MANTRA te puede llevar desde la alta velocidad del death metal más brutal hasta un relajante solo de guitarra pasando por un “bridge” progresivo. Melodías que acompañan a la voz durante la mayor parte del tema son la constante en este y en casi todos los tracks.“Fear What You Will Become” es el séptimo track y primer sencillo promocional del álbum, cuenta con su propio “lyric video” y lo puedes ver al final de esta reseña. Se podría decir que el tema resume todo lo que expresa el disco, ya que comienza suave y va incrementando su fuerza, incluye ritmos rápidos, riffs marcados, sonidos generalmente melódicos y solos de guitarra suaves y cargados de feeling. Todo eso unido a una letra que invita a mirarnos en un espejo y evaluar nuestras propias vidas, teniéndole miedo a eso en lo que nos convertiremos. Sin duda una buena elección como promocional.Una de las cosas que más destaca en “Prayers Of The Unseen”, el octavo track, es el solo de guitarra, que contrasta con la rapidez del tema y le da un matiz único. Personalmente es mi solo de guitarra favorito de todo el disco. Los gruñidos guturales que se intercalan con los gritos y el riff de la guitarra rítmica hacen de este uno de los mejores tracks sin duda. Melódico y potente como todos, pero remarcable por su variedad.Ya dijimos que a MANTRA le gusta jugar con la dinámica musical en sus temas y “On The Threshold” no escapa de eso. El noveno track comienza con agresividad y se va acrecentando en velocidad hasta que el blast beat ya no da para más. Podría ser el tema más pesado del disco, y hasta parece ser mucho más técnico que los demás, pero no por eso deja de sonar melódico cada riff y cada nota, al fin y al cabo esa es la marca que distingue a la banda.Track número diez, se acerca el final y como suele ocurrir, a medida que nos acercamos a puerto las olas se tornan más agresivas y este mar llamado “In Solitude… I’ll Watch You Fall”, no es la excepción. “Safe In The Wound” es, junto a su predecesor “On The Threshold” y al siguiente tema, “Bleeding Scars”, ese sonido que describe como las olas nos llevan hacia las rocas, a toda velocidad. A este punto no se puede decaer y cada tema es más enérgico que el anterior. Blast beats, veloces riffs y gritos contundentes son la constante, acompañados siempre de secciones “down tempo” y solos cargados de sentimiento y melodía. Por supuesto, llegar al final implica descargar toda la energía remanente, como si de un orgasmo se tratase, y eso es lo que ocurre con “Messages Were Left”, mi favorita del disco (y vaya que fue difícil escoger una).“Messages Were Left” es el track número doce, con el que se cierra un disco increíble. En este track, tal vez el más rápido del álbum, se juntan velocidad, agresividad y poder (todos reconocibles en cada uno de los instrumentos) pero sobretodo diferencia, es la oveja negra del álbum, un tema que no parece formar parte del resto, tanto así que es el único track que no tiene sección “lenta” y cuyo solo de guitarra ocurre antes de que llegue la mitad de la canción. Dicho solo no marca un cambio en la dinámica musical del track, cosa que ocurre en los otros once temas del disco, es decir, hasta el solo es “rápido”. Una letra reflexiva que nos culpa de nuestra propia extinción es el componente ideal para este gran tema. Los riffs, la voz, la batería son desde el comienzo un despliegue de furia y pasión, si estuviésemos hablando de un concierto podríamos decir que están queriendo dejar todo en la última canción. Lo que sí dejaron con toda seguridad en este cierre fue un mensaje claro que dice: MANTRA no está jugando. Lo bueno, lo malo y lo feoComencemos con LO FEO: La Comparación. Aclaro, lo feo es comparar, no el disco, pero tarde o temprano llega ese momento que nadie quiere enfrentar, ese en el que pensamos: ¿A qué se parece?. Solemos relacionar nuestros nuevos hallazgos con cosas similares que hemos visto previamente, llegando a tildarlos de “copia” si nos parecen muy familiares. Es normal que nuestras referencias a la hora de definir el sonido de una banda sean siempre otras bandas, en lugar de estilos y sonidos, y para los objetivos de una reseña siempre es útil decir “suena parecido a…” ya que le dará a ustedes una idea mas clara de qué es lo que tratamos de decirles.Es común escuchar comentarios que afirman que MANTRA suena como IN FLAMES, algunos lo dicen como elogio y otros tal vez como una queja, pero ya quisieran muchos sonar así. ¿Suena éste nuevo disco a IN FLAMES? Pues si, suena como IN FLAMES en sus mejores años, pero por momentos también suena como AT THE GATES, AMON AMARTH o DARK TRANQUILLITY, hasta THE BLACK DAHLIA MURDER me viene a la mente cuando escucho algunos de estos temas y sus cambios drásticos de ritmo en los que aparece un solo de guitarra. Aunque las comparaciones siempre son odiosas dicen por ahí que “todo está inventado”, y aunque siempre podemos darle nuestro toque de originalidad a las cosas que nos influencian, no es ningún delito parecernos a algo previamente creado. Es lógico que todas estas bandas sean influencia para la agrupación caraqueña y eso se refleje en el sonido de sus canciones, así que no hay nada de copia en esto, MANTRA suena a eso que tienen en común todas estas bandas: death metal melódico.¿LO MALO? Que hayan tardado tanto en publicar el disco, de resto solo se me ocurre una cosa y es bastante rebuscada, tiene que ver con la métrica. Da la impresión de que en algunas de las canciones se compuso primero la música y luego se agregó la letra, una técnica de composición musical muy utilizada y válida, sin embargo es delicada porque si no se toma el cuidado necesario obtenemos como resultado canciones cuyas frases parecen metidas “a juro” dentro del compás. El metal es uno de los géneros más flexibles en este aspecto y permite jugar con la métrica, e incluso no es obligatoria la rima, pero siempre con cuidado de no exagerar. De cualquier manera no es nada grave y muy rebuscado de mi parte, lo cual dice mucho de lo dificil que fue conseguirle un defecto a este gran trabajo.Cualquier cosa que le queramos restar a este álbum no afectará la sumatoria total en la que destaca LO BUENO: la composición musical, los arreglos y la producción. Luego de todo lo que se ha dicho, tema por tema, sobre las virtudes de este disco, solo nos queda resumir que son la fuerza, el sentimiento, la pasión y esa manera única de hacer de “In Solitude… I’ll Watch You Fall” un viaje musical, lo que hace de este álbum una gran obra discográfica, adquisición obligada para los amantes del death metal melódico y recomendada para los metaleros en general. Es un disco que HAY que tener.Frank HernándezDirector en RocktambulosEscucho más de lo que veo y escribo más de lo que leo. Periodista musical. Radio Host. Colaborador en Billboard y Rockaxis. Fundador de Rocktambulos