Ayúdanos a hacer periodismo independiente

Por favor, desactiva Ad-block

Trabajamos duro para brindarte contenido gratuito y de calidad. Mostrarte publicidad es la única forma de monetizarlo y seguir creando.

Estás aquí
Página principal > Destacada >

Dig That Groove!: THE TOY DOLLS pasó por #BuenosAires #Reseña

Luego de dieciochos años de ausencia, THE TOY DOLLS regresó a Buenos Aires, Argentina, para presentarse en El Teatro de Flores. Esta conexión entre banda y público significó la conjugación entre treinta y siete años de historia Punk con un público que resignificó el regreso de estas leyendas de la música a sus tierras. Entre las personas que asistieron al show, podía escucharse, a veces como murmuros, otras en un tono algo más usual, y a veces en alaridos de borrachera, una devoción absoluta por el grupo: repaso de canciones, relatos sobre anécdotas, compra y más compra de merchandising. Y sí, el conjunto liderado por Michael “Olga” Algar (guitarra y voz) estaba de nuevo en Argentina.

Pero, primero, la noche contó con la apertura de EXPULSADOS, grupo argentino que se encuentra festejando sus 25 años. La banda repasó sus clásicos pero también abordó a su último trabajo, Suicidas y Sicarios (2016). El conjunto liderado por Seba Expulsado (voz), contó con un buen feedback del público asistente al evento. Con una buena performance, el cuarteto se retiró triunfal del escenario de Flores.

Se abrió el telón y el icónico logo de la banda, mostrando una pícara sonrisa, concentró todas las luces del recinto. De fondo, sonó “Hello”, clásico de LIONEL RICHIE, como gesto irónico para evidenciar el anhelo del público por ver al grupo, que salió al escenario, de manera demoledora, con “Fiery Jack”. Desde el comienzo, podía apreciarse una fuerte presencia de las frecuencias bajas en la mezcla, un énfasis dado a Duncan Redmonds (batería) y Tom Blyth (bajo). Esa dupla acompañó con su solidez a “Olga”, siempre con buenos coros y una excelente performance instrumental.

Y con esta base sonora, fundamental para comprender qué ocurrió, el grupo se despachó con una canción tras otra, sin respiro, “Cloughty Is a Bootboy!”, “Bitten by a Bed Bug” y, llegando hacia la fase del álbum Dig That Groove Baby (1983), ese arrollador debut discográfico, “Up The Garden Path”, “Dougy Giro” y “Spiders in the Dressing Room”.

Así, se implementó una situación ideal para “Nellie The Elephant“, ese himno de THE TOY DOLLS que, sin quererlo, en su estribillo grita “trump, trump, trump”. Ante esta hilarante situación, en una reciente entrevista le preguntamos a “Olga” si se lo tomaba con humor, a lo que nos contestó: “totalmente”. Por supuesto, ante este clásico del Punk, El Teatro se convirtió en una olla en ebullición.

“Olga” es quien se “come” el escenario, ante él están todos los ojos. Puede hacer un pseudo striptease, gestos irrisorios y ridículos con un carisma remarcable, decir inocentemente “tengo sed” para que le den una botella de champange de plástico que explota en papeles para el público, pero, por sobre todas las cosas, es una persona que, al quitarse sus icónicos lentes, mira con emoción al público cuando ve el feedback que hay en cada canción.

Y en referencia a la destreza instrumental de THE TOY DOLLS, existieron dos puntos álgidos del show: “Toccata in Dm” y “Wipe Out”. La primera canción, original de JOHANN SEBASTIAN BACH, fue presentada por “Olga” como propia “de alguien más viejo que él”. De cualquier manera, parece que los años no pasan porque la ejecución frenética de la pieza fue remarcable. En lo que respecta al clásico surf de THE SURFARIS, fue otro momento en el cual el público enloqueció ante la psicótica melodía.

Llegó el momento de los bises, con “Olga” emocionado ante “The Saints Go Marching In” y, directamente, la locura absoluta con “Dig That Groove Baby”, seguido por una versión de “She Goes To Finos” para el recuerdo, con globos cayendo desde el techo de El Teatro y un pogo arrollador. Con mucha emoción en sus rostros, los muchachos de THE TOY DOLLS se retiraron, validando su riquísimo legado con el público argentino.

Después de haber dado una auténtica fiesta, con metafórico champagne, globos y música festiva, el trío inglés no se olvidó de lo más importante: dar un buen show. El sonido fue excelente, la performance en escena digna de auténticos showmen y, dado ese panorama, un gusto a victoria para los fieles que se acercaron al recinto de Flores para reencontrarse con la banda, que afianza cada vez más su lazo con Argentina. ¡Será hasta la próxima!

Facundo Guadagno
Redactor en Rocktambulos
Antropólogo social y cultural, escritor, escéptico y crítico
Facundo Guadagno on FacebookFacundo Guadagno on Instagram

Todas las fotos fueron tomadas por Carlos Martinez para rocktambulos.com / Todos los derechos reservados

 

 

¿Qué opinas? ¡Queremos saber tu opinión!