Hardcore Nao Tem Fim: RATOS DE PORAO en Buenos Aires #Cronica

Si todos se suben al tren de los “Revisited” y salen de gira tocando sus discos más emblemáticos en su integridad ¿por qué no habría de hacerlo RATOS DE PORAO? Se cumplen 25 años de «Anarkophobia», el disco que significó un punto de inflexión en la carrera de los brasileños y los llevó a ser los representantes del hardcore-punk Latinoamericano a nivel mundial. No suelo estar muy de acuerdo con esto de festejarle cumpleaños a un disco, pero teniendo en cuenta la tensa situación socio política que se está viviendo en Argentina me parece más que oportuna esta celebración. Aquel que se identifique y haga propios los contenidos cantados (o gritados) hace ya 25 años en «Anarkophobia» seguro vivió una noche especial y de mucho descargo a la velocidad del punk.

RATOS DE PORAO se presentó en el marco del Rotten City XL de la mano de Origins y Noiseground, celebrado en The Roxy Live luego de un cambio de locación. La música arrancó temprano, demasiado temprano quizás, eran las 18:15 cuando ALTAR saltó al escenario. A pesar de que la propuesta de esta banda apunta hacia el Black metal de la vieja escuela, su sonido y la elección de canciones hizo que su tiempo sobre las tablas se asemejara más al doom, un doom frío, muy Noruego en la voz, pero doom al fin. Muy destacada presentación de ALTAR que en una fecha inclinada más hacia el mosh pit que al headbang lento y pesado supo transmitir su propuesta para los pocos presentes en esa temprana hora.

La misma suerte corrió UNDERMINE frente a un Roxy que se iba llenando muy de a poco. Con una mezcla entre thrash y death clásico la banda fue la que dio el puntapié inicial a la velocidad, elemento que tendrían en común junto con todas las bandas que vendrían luego.

BANDERA DE NIEBLA fue el tercer nombre de la noche, las canciones de su reciente primer disco Panel Óptico fueron muy bien recibidas por la gente, cerraron con «Días Buenos y Malos» de Riff. El Carpo y el buen crossover nunca fallan.

Las cuatro bandas teloneras tuvieron buena respuesta por parte de la audiencia y los Uruguayos de MOTOSIERRA fueron los últimos encargados en encender la mecha. Mucha velocidad aplicada en canciones roqueras y actitud punk como recurso para ganarse al público fue lo que trajo la última banda antes de los pesos pesados.

-Leé nuestras reseñas sobre los discos de ALTAR y BANDERA DE NIEBLA acá-

Teniendo en cuenta que en total hubo cinco bandas es entendible que se haya arrancado antes del anochecer y la puntualidad es algo para destacar: todas las bandas arrancaron a la hora en que se había anunciado previamente a través de las redes sociales, sin más de quince minutos entre cada una. Lamentablemente “el Roxy” – quizás por motivos personales de los asistentes o por no querer permanecer mucho tiempo adentro del recinto- no se vio lleno hasta casi tres horas después del arranque de la música, cuando ya estábamos sobre la hora pautada para el arranque de Ratos de Porao. Las primeras bandas tocaron para no más de treinta personas.

21:30 era la hora señalada y varios minutos antes ya se había dejado libre la zona donde tomaría vida el mosh pit, infaltable en fechas ligadas al thrash, el hardcore y mucho menos en una noche como esta. RATOS DE PORAO salió a matar con “Counting the Dead”, el tema que inauguró Anarkophobia en el año 1991 volvía a hacerlo en The Roxy. Un desmadre lo que se vivió durante los casi 40 minutos que dura la placa, cortos y pocos fueron los descansos que se tomaron los brasileños entre canciones, el que más interactuaba y bromeaba con la gente era su carismático frontman Joao Gordo. Jao, mítico guitarrista y único miembro de la formación original, sólo le dedicó unos pulgares arriba al público cuando éste gritaba su nombre, su ceño fruncido a la hora de tocar era quien hablaba por él, mientras que Juninho -el más joven y ágil de los cuatro- seguro fue el más entretenido y complicado para fotografiar ya que se la pasó saltando y recorriendo su costado del escenario con su Rickenbacker como si este fuera de juguete.

Así fueron pasando los títulos que conforman Anarkophobia, no podría decir cual fue el más festejado ya que en todos parecía que las vallas estaban apunto de venirse abajo. Mención honorífica para para el personal de seguridad que no tuvo descanso atajando a los que surfeaban por encima de la gente en todas las canciones, salvando a los fotógrafos de varias patadas. Salud para ellos también que mejor que nadie saben lo que es arriesgar tu equipo de trabajo en este tipo de fechas. El momento humorístico si así se quiere fue cuando Joao pidió dinero, cocaína y sexo a Jesucristo, dando a entender que era hora de “Universal church”.

Anarkophobia pasó rápido, más rápido de lo que la mayoría hubiera querido, ahora solo queda esperar que el disco cumpla tres décadas, más allá de que los clásicos pertenecientes a este álbum siempre están presentes en la lista de temas habitual de RATOS DE PORAO, escuchar el álbum entero y en orden tiene un sabor distinto. Fuera del disco homenajeado el momento más alto de la noche fue con “Crucificados pelo sistema”.

RATOS DE PORAO es una leyenda viva, no necesitan salir de gira tocando un disco de hace 25 años para poder colgar el cartelito de “entradas agotadas” como sucedió anoche, esto lo considero como un regalo para su público. Volvieron una vez más a la Argentina, un lugar donde a esta altura siempre juegan de local, tocaron Anarkophobia en su totalidad y en una hora clavada de recital dieron cátedra y mostraron por qué no se los puede pasar por alto cuando hablamos de hardcore en Latinoamerica.