Ayúdanos a hacer periodismo independiente

Por favor, desactiva Ad-block

Trabajamos duro para brindarte contenido gratuito y de calidad. Mostrarte publicidad es la única forma de monetizarlo

Estás aquí
Página principal > Reseñas >

Canciones de Trinchera: KANONENFIEBER debutó en Buenos Aires #Reseña

La escena death y black metal está en un auge de transición en cuanto a los conceptos que sustentan el arte, acompañados de una propuesta a nivel estético que se desprende en gran medida de sus precursores. Para la segunda mitad de la década 00’s, los estadounidenses MINENWERFER se convirtieron en pioneros del Black Metal temático de la Gran Guerra, seguidos ya en la década posterior en una “segunda ola” por los ucranianos 1914, que con estilo más enraizado en el Death Metal, pero con tintes black, mantienen el concepto.

Más recientemente aún, en Alemania se alzó la voz de un nuevo proyecto que combina el anonimato de su creador -y único integrante-, un ente conocido simplemente como Noise, y que sigue el camino de contar en sus canciones los lamentables sucesos de la Primera Guerra Mundial. Con vestuarios que recrean uniformes típicos del período histórico, y rostros totalmente cubiertos, Noise y su proyecto KANONENFIEBER sale a girar con 4 músicos sesionistas para llevar su música al vivo, y en contexto de su primera visita a Latinoamérica se presentaron en el Teatrito de Buenos Aires el pasado jueves 4 de diciembre.

Kanonenfieber

Si bien estaba prevista la participación de DEMIURGO como una de las bandas invitadas, a último momento nos enteramos que finalmente no se presentarían. No hubo una explicación formal sobre esta ausencia durante el show, pero de manera anónima fuimos contactados por alguien que nos pidió evitar cualquier comentario que sugiriera que fueron dados de baja, y dejó claro que fue el grupo quien decidió bajarse del evento.

De esta manera quedó solamente en RHAUG la responsabilidad de extender la oscuridad al Teatrito. Los blackers brindaron lo mejor de su repertorio, entre canciones de su disco homónimo editado en 2024, y otras nuevas que formarán parte de próximos lanzamientos. Su sonido fue sólido, y su puesta en escena bien elaborada entre escenografía y atuendos, coronando un show de 45 minutos que estuvo muy a la altura de las circunstancias.

RHAUG

Para las 21:30, se apagan las luces del recinto y con la intro “Grossmachtfantasie” van invadiendo progresivamente el escenario los músicos de KANONENFIEBER, que fueron recibidos con una notable ovación de un público, que resultó ser inclusive más del que me pude imaginar. “Menschenmühle” marcó el inicio del esperado show, siendo celebrado y pogueado a todo lo que daba la eufórica audiencia.

Tras ausentarse brevemente del escenario regresan, esta vez con una expresión corporal retraída, casi abrazándose a sí mismos, como sintiendo frío, mientras se escuchaba el rumor de un gélido viento. “Der Füsilier I” fue la siguiente bomba en el campo de batalla, acompañada de un brillante performance para contar la dura historia de una marcha desesperada a través del invierno helado de Europa del Este, para una misión de rescate fallida, donde el enemigo principal del fusilero no es el ruso, sino el propio frío y el abandono. Noise hacia el final del tema toma entre sus manos una fotografía, la observó fijamente hasta conmoverse, llora, deja fluir su lamento. Mientras seca sus lágrimas dobla la foto, la besa, y la arroja al público.

Al volver de una segunda ausencia breve, el clima parecía haber cambiado bastante. Ahora lucen más bien acalorados, con las mangas de sus camisas recogidas la mayoría de ellos. Noise porta en una mano una lámpara, y en la otra una granada. Contrastando magistralmente la historia del fusilero, ahora el contexto es una ruptura mental. La falta de luz, el ruido incesante de los bombardeos y la presión de ser volado en cualquier momento llevando al límite a un topo. Un retrato de neurosis de guerra.

“Die Havarie” sonaría más adelante, con Noise participando de la intro con un redoblante y lanzando los palos al público. Cuando la terminaron, se ausentaron nuevamente -ya había perdido la cuenta de cuántas veces lo hicieron-, y al volver Noise porta nuevamente el casco que tenía al principio del show, pero ahora nos muestra con una máscara de calavera la cara de la muerte.

Con esa cara empieza a sonar “Ausblutungsschlacht”, con la que nos presentaron el horror de la Batalla de Verdún (1916), el epítome de la Guerra de Desgaste, una estrategia cuyo fin es la desprovisión de los soldados para destruir su voluntad de lucha en una de las batallas más largas y sangrientas de la humanidad. La canción denuncia la industrialización de la muerte, y la futilidad del sacrificio. Tras esta lección histórica, y un gesto de reverencia por cada uno de ellos se ausentan una vez más, hasta ahí nada raro.

Lo raro empezó cuando de alguna manera la sensación de que demoraban mucho en salir nuevamente era algo que se respiraba en el recinto. Se prenden las luces bajas del Teatrito, hasta ahí todavía podía que las apagaran de nuevo cuando la banda volviera al escenario. Pero no pasaba, y en lugar de eso a continuación se cerró el telón, e instantes después se prendieron las luces altas y se escuchaba música funcional nuevamente.

Para el asombro de muchos que creían habría un par de temas más tras 60 minutos reloj de show, no ocurrió: el show había terminado. De esta manera un tanto desorientadora culminó el debut de KANONENFIEBER en el país, que contó con una banda impecable con un sonido impecable, pero que tuvo un final que descolocó a la mayoría de la gente.

Es muy interesante contar con este tipo de propuestas en la música, que una vez más sirve como instrumento de protesta, de condena a acontecimientos catastróficos de la historia, y con una estética que muy en contraparte de la que forjó el Black Metal en sus inicios, la percibo como una suerte de negación del ego, que busca poner el foco en la experiencia colectiva de la música, que en lugar de expresar agresividad expresa nihilismo, introspección y una renuncia a la figura del músico como «estrella de rock».

Manuel Herrera
Colaborador en Rocktambulos
En las páginas de un libro o las canciones de un disco me puedo perder, y con suerte volver. Baterista, entusiasta del audio, intento de cronista.
Amante de la música y la buena comida.

©Todas las fotos fueron tomadas por JoLu de Simone para Rocktambulos / Todos los derechos reservados

2 comentarios en “Canciones de Trinchera: KANONENFIEBER debutó en Buenos Aires #Reseña

  1. Hola! Gracias por la aclaración, de hecho hasta donde pude saber en efecto fue lo que pasó. Simplemente fue una manera de decir que finalmente no formaron parte del evento, que no se presentaron. Nada más que eso, más allá de los motivos.

  2. Demiurgo no fue dada de baja del cartel. La banda decidió no tocar por incumplimientos de la productora en lo acordado previamente.

Deja una respuesta

Top