Ejército De Un Solo Hombre: Así Suena “Dictator” de DARON MALAKIAN AND SoB #ReseñaDestacadaDiscos (Así Suena)Reseñas por Roger Alan Provan - 07/10/201824/05/2020 Desde su debut en 1998, SYSTEM OF A DOWN no había dado tregua a su actividad en el estudio ni en los escenarios. Luego, casi que de un día para el otro, en 2006 cesó todo. No más tours, no más música, no más nada -este sí fue un hiato en serio, Ozzy-. La disconformidad y las diferencias artísticas en el seno de la banda habían hecho mella en lo que hasta ese entonces había sido una maquinaria perfecta.Ya pasaron 13 años desde que salieron al mercado los gemelos Mezmerize e Hypnotize en el 2005, sus últimos discos hasta la fecha. Pasó tanto tiempo que la abstinencia -*se rasca la mejilla*- por material original está a flor de piel. Hasta las nuevas generaciones de metaleros, posteriores al hiato, están a la expectativa. Y aunque ya la banda se encuentre activa con esporádicas giras, por el momento no hay nuevo disco en el horizonte…Cicatrices, Luto y Rock N’ RollDejando los lamentos y anhelos de lado, vayan a los libritos de sus discos de SYSTEM -o bueno, Wikipedia si tienen un parche en el ojo- y vean quién se encargó casi exclusivamente de la música del grupo: DARON MALAKIAN. El innovador guitarrista fue el que puso la materia prima para moldear junto a sus compañeros incontables clásicos -y no clásicos- brillantes. Por ende, una vez que el hiato de SOAD fue una asumida y triste realidad, la noticia de que el guitarrista fundaría SCARS ON BROADWAY (su actual proyecto) debió haber entusiasmado/aliviado a más de uno. A pesar de que Scars On Broadway (2008) contó con una recepción mixta por parte de la prensa y un interés poco longevo de parte del público no familiarizado con su pasado, es innegable que sus 15 canciones cuentan con el ADN de los armenios. La placa, enfocada más en el Punk y el Rock and Roll, todavía mantenía fuertes reminiscencias con el Metal Alternativo que había forjado junto a ellos. Escuchen sino canciones como “Insane”, “Chemicals” o “Wh*ring Streets”, entre otras, para comprobarlo por Uds. mismos. Además de sacar a relucir su faceta de multi-instrumentista, D-Man había contado con la colaboración de su compañero en SOAD, John Dolmayan, para grabar las baterías (así como en el vivo).No mucho tiempo después de su lanzamiento, y luego de una breve gira, SCARS ON BROADWAY seguiría activo sin la participación de Malakian -*facepalm*-, quien no pudo sobrellevar el luto por la interrupción de SYSTEM OF A DOWN (dato confirmado tiempo después). Aunque el músico apareció intermitentemente en los radares de la banda y eventualmente volvió a ella full-time en 2010, posterior al 2013 no hubo actividad en el búnker de la agrupación. Dados por muertos, tuvo que pasar una década hasta que SCARS reactivase su vida discográfica con el single, convenientemente titulado “Lives”, adelanto de Dictator.¿Acaso Esquivamos Una Bala?El segundo larga duración del proyecto, recientemente renombrado como DARON MALAKIAN AND SCARS ON BROADWAY, tiene una historia peculiar. Fue grabado…¡hace 6 años! En 2012, el guitarrista lo grabó en tan sólo 10 días, encargándose de la batería también. Un año atrás SYSTEM OF A DOWN había vuelto al ruedo, y como existía la posibilidad de tal vez grabar nuevas canciones, Daron decidió darle prioridad a su banda de toda la vida y retrasar el lanzamiento de Dictator. Lo que vino después ya lo conocemos: el nuevo álbum de los armenios nunca se materializó y, después de tener suficiente con tanta incertidumbre, D-Man editó el dilatado LP este 20 de Julio.“Lives”, además de haber sido la encargada de anular escepticismos, es el puntapié que abre el álbum. Siendo objetivo, se le puede criticar con total justicia el uso de un riff tan genérico, pero el gancho es innegable y resistirse al cabeceo, imposible. Los guiños hacia la cultura armenia, la cual el track se encarga de celebrar, también están audibles en temas como “Angry Guru” y “Fuck and Kill” (en realidad están en todas las canciones en mayor o menor grado). Musicalmente se puede relacionar a los 12 tracks presentes con lo exhibido en Hypnotize, donde las influencias rockeras tuvieron un papel prominente. Canciones como “Dictator”, “Talkin’ Shit” y “Sickening Wars” podrían ir a la par de perlas como “Kill Rock and Roll” y “Tentative” sin desentonar. Conservan ese factor de gancho/agresividad que tan bien le funciona a Malakian.Pero Dictator está lejos de ser un proto-lanzamiento de SOAD. Suena como ellos por momentos, pero con Daron a cargo de toda la composición es obvio que va a tener parte de ese sonido. Sin embargo, éste material es más sencillo, sin tantos giros, de sonido más limpio, y donde se prioriza el gancho –“Never Forget”-.Mientras su antecesor contó con unas letras un tanto absurdas y repetitivas -aunque efectivas-, este álbum representa una notable mejora. A pesar de persistir ese importante grado de repetición, cuentan con mayor sustancia, especialmente los estribillos. No hay necesidad de intrincarse si uno no lo siente natural, y Daron es un hombre sencillo, líricamente hablando claro.La placa extrañamente cierra, no con uno, sino con dos covers. El primero es una versión instrumental de “Gie Mou”, perteneciente al compositor griego STAMATIS KOKOTAS, que sirve a modo de intro para “Assimilate” de los canadienses SKINNY PUPPY. Este último es una reinterpretación que le hace absoluta justicia a lo que yo creo que es el verdadero significado de la palabra “cover“, es decir, la que no implica calcar la original, sino dotarla de personalidad propia. Dictator parece llegar en el momento justo, con un personaje como Donald Trump en la Casa Blanca. Sin embargo, su título no es un dardo personalizado al actual presidente de EE.UU., y no sólo por el hecho de haber sido grabado hace 6 años, sino que en palabras del músico:“Si miramos la historia, siempre hubo -y habrá- un tipo malo gobernando. Pero un dictador también puede ser alguien que forme parte de tu vida cotidiana, siempre diciéndote qué hacer”.Posterior a su salida escuché/leí comentarios varios como “suena a SYSTEM” o “esto pudo haber sido un disco de ellos y nos lo perdimos”, y mis escuchas preliminares no podían distar más de ese veredicto. En mi cabeza pensaba “si éste fuese el nuevo disco de SYSTEM OF A DOWN, es una decepción…esquivamos una bala”. Es verdad que faltarían los aportes de John, Shavo y Serj para juzgarlo debidamente, pero de todas formas creo que es la abstinencia hablando.El mundo merece una nueva/última placa de SOAD, pero si tenemos ese privilegio, debe estar a la altura de sus trabajos previos, sobre todo luego de hacernos esperar tanto. En ese sentido, Dictator no cumpliría las expectativas, pero bajo el nombre de DARON MALAKIAN AND SCARS ON BROADWAY la historia es otra, y su segundo álbum es tan placentero como se esperaría de la mente brillante detrás de él. Se podrán discutir los hipotéticos resultados de haber trabajado junto a sus compañeros, o incluso otros músicos, pero éste hombre puede solo contra todo.Roger Alan ProvanColaborador en RocktambulosLa música, sin importar el género, popularidad, año o país de origen, tiene una chance en mis oídos. En ella encuentro mi camino.