Fuego con Fuego: AMARANTHE y DELAIN formaron “El Nexo” en Buenos Aires

Con Rosario y el Luna Park como previa, la dupla conformada por AMARANTHE y DELAIN se presentó el pasado domingo 26 de Noviembre en el Teatro Flores de Buenos Aires. Antes de juntarse en Argentina, ambas bandas estuvieron tocando por separado en Brasil (DELAIN pasó también por Chile), por lo que esta última presentación sirvió para dar cierre a la gira sudamericana de ambas.

La fecha le permitió a los fans de Buenos Aires disfrutarlos en un formato más íntimo y extendido que el que se vivió el día anterior en el Luna Park, cuando se presentaron junto a TARJA. Tan íntimo fue, que incluso varios de los músicos de AMARANTHE salieron del backstage para ver el show de DELAIN desde el público y no dudaron en tomarse fotos y/o conversar con sus seguidores.

Si de algo podemos estar seguros es que el debut de AMARANTHE en el sur de América fue un acontecimiento inolvidable para la banda. No sólo porque pisaron esta tierra por primera vez, sino porque se presentaron en el mítico Luna Park de Buenos Aires junto a la inmensa TARJA y compartieron con DELAIN tres fechas mágicas consecutivas. Pero también será recordado por los contratiempos que surgieron.

Con contratiempos me refiero al hecho de que Johan Andreassen, bajista de la banda, se encuentra ligeramente inmovilizado por una fractura de pie (cosa que no impidió que continúe su gira) y a eso se le sumó el resfriado que contrajo Elize Ryd, afectando su presentación. Además, como suele ocurrir con las primeras bandas, tuvieron problemas de sonido durante su show y la menor concurrencia de la noche. Sin embargo nada de esto afectó la entrega de la banda y, por el contrario a lo que uno pensaría, sirvió para que demostraran su gran profesionalismo al ejecutar cada tema con la misma pasión y calidad que los caracteriza.

Un set de 16 canciones fue suficiente para satisfacer a los presentes, y es que las canciones de AMARANTHE valen para todos los gustos. Sus temas altamente influenciados por la música electrónica convirtieron el lugar en una verdadera fiesta desde el arranque con “Maximize”. Si bien el estilo es metalero, va desde lo industrial más oscuro hasta el pop electrónico más rosa y alcanza el límite con baladas que parecen un soundtrack de Disney. Verlos en vivo tocando canciones como “Digital World”, “Electroheart”, “Boomerang” y “Drop Dead Cynical” hacen que te preguntes ¿por qué no suenan cosas como éstas en las discos? Hago un llamado a los DJ’s para que incluyan algo de Elize Ryd, Olof Mörck y compañía en su repertorio.

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Las baladas “Amaranthine” y “Endlessly” le dieron el toque romántico a la noche, sin embargo esta última fue víctima del peor incidente técnico posible: se fue la luz. Como si no fuera suficiente que “la pobre” Elize estaba haciendo un esfuerzo tremendo para cantar resfriada, la energía colapsó justo en este tema que la colocaba a ella, prácticamente en solitario, en el medio del escenario. La reacción del público cuando todo se apagó fue ejemplar y la cara de “tragame tierra” que tenía Ryd se convirtió de inmediato en asombro y felicidad ya que la gente no paró de aplaudir, gritar y cantar los clásicos “oe oe oe” y el “sentimiento que no puedo parar”. La banda se limitó a grabar con sus celulares mientras sus rostros desbordaban alegría y satisfacción.

Unos minutos más tarde la electricidad volvió al escenario y esta vez Elize llamó a Nils para que cantara con ella el tema y hacer así una versión inédita. “Esto nunca se ha hecho, así que veremos como sale” dijo la vocalista cuando invitó a su compañero para que la ayudara. El resultado fue impecable, la voz de Nils es excepcional y esa dupla sonó de maravillas. Pero no fue solo Nils quien ayudó a Ryd a cantar, pues para ese mismo tema apareció una fan por la que Elize había preguntado antes del tema pero nadie respondió. Al parecer la chica le pidió previamente a la cantante que le permitiera cantar con ella, por lo que fue invitada al escenario para ayudarla a cantar “Endlessly”.

Y hablando de baladas, la gran ausente fue “Burn With Me”. Esperemos suene una próxima vez. La banda hizo encore y luego de que Johan bailara en muletas al ritmo del “ehhh Amaranthe es un sentimiento…” y brindara con nosotros por ese cierre del tour, reaparecieron con “That Song” y se despidieron con la poderosa “The Nexus”, dejando el escenario listo para los más esperados de la noche: DELAIN.

A las 21:50 se apagaron las luces y se abrió el telón. El sonido de “The Monarch” era el indicativo de que había comenzado el show de la banda liderada por Martijn Westerholt (ex-WITHIN TEMPTATION) y Charlotte Wessels. La gente estuvo animada desde el inicio, ¿y cómo no? Si abren con “Hands Of Gold”. Charlotte es mucho más que una frontwoman, es una verdadera animadora y hasta su tono de voz se ajusta a la situación. Entre cada tema agradece y saluda, en medio de ellos invita al público a saltar y cantar, y mientras el equipo técnico resuelve cualquier inconveniente (que siempre los hay) se encarga de conversar con sus fans, los señala, los mira a los ojos, hace que se sientan apreciados y eso no se ve todos los días.

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“Tienen un lugar en nuestro corazón, nos los queremos llevar a casa” dijo Wessels ante la efusiva recepción de la audiencia hacia cada uno de los temas de la banda. Los holandeses ejecutaron un set muy similar al de su más reciente lanzamiento discográfico: A Decade Of Delain – Live at Paradiso, donde destacaron los temas “Suckerpunch”, “Here Comes The Vultures”, “Fire with Fire”, “Mother Machine” y por supuesto, el cierre con “We Are The Others”. Sin embargo también pudimos disfrutar de canciones como “Go Away”, “Not Enough” y “Don’t Let Go”.

Cada miembro de DELAIN asume su personaje y no paran de moverse por todo el escenario, contagiando con esa energía a cada uno de los presentes, y si bien toda la banda derrocha talento, es imposible no hablar de Merel Bechtold, la guitarrista de la banda que llama la atención por su talento, su energía, su actitud, su belleza y su tamaño (su pequeña estatura hace que parezca una niña divirtiéndose entre todos los demás). Merel, que toca también con Anneke Van Giersbergen, entre otras bandas, se encarga de conectar sus propios equipos antes del show y recoge sus cables como cualquier mortal, haciéndola todavía más admirable.

Los fanáticos que se acercaron al hotel para saludarlos, quienes se los toparon durante alguno de los eventos y quienes pudieron acceder al Meet And Greet, pueden dar fe de que los integrantes de ambas bandas son bastante simpáticos y humildes, por lo que el fin de semana pasado en Argentina, además de quedar en la memoria de los seguidores como el momento en el que pudieron ver a sus ídolos por partida doble, o triple, quedará como el recuerdo de haber conocido seres humanos cálidos y amables, además de talentosos, haciendo que la sensación de nostalgia sea mayor y a tan solo un día de haberse ido, ya se les está extrañando.