MASTERPLAN se suma al viaje nostálgico: Así suena “PumpKings”DestacadaDiscos (Así Suena)Reseñas por Roger Alan Provan - 28/10/201728/10/2017 La comunidad metalera estalló de felicidad al saber que Michael Kiske (cantante del 86’ al 93’) y Kai Hansen (guitarrista del 84’ al 89’) volvieron a ser parte de la calabaza. Si bien la formación actual y clásica de HELLOWEEN está llevando a cabo la esperada Pumpkins United World Tour (que pasará por Argentina el 2 de Noviembre en el Estadio Luna Park), no todos son parte de la parada. Uli Kusch (baterista del 94’ al 01’) y Roland Grapow (guitarrista del 89’ al 01’) quedaron fuera de la reunión, pero este último no se quedó con los brazos cruzados.Es así que PumpKings aparece bajo la firma de MASTERPLAN, proyecto que Roland formó con Uli a principios del milenio post-despido de la H alemana. Argumentando que otros artistas luego de separarse de sus bandas principales siguieron tocando ese material en sus proyectos posteriores, el violero decidió que el 6to trabajo de MASTERPLAN fuera -como lo anticipaba el increíble arte de tapa- una compilación de canciones de HELLOWEEN que llevan su ADN. Algunos se preguntarán si no era mejor lanzar este material como solista en vez de arrastrar a sus compañeros de banda a este “capricho”. Veamos.Sea o no una represalia contra Weikath y Cia., éste lanzamiento tiene cosas positivas. Aunque las composiciones cuentan con una casi nula vuelta de tuerca -las canciones título de The Dark Ride (2000) y The Time of the Oath (1996)-, el lavado de cara en cuanto a la calidad sonora es placentera y da nuevo color a composiciones que gozaron de un tratamiento más “precario” cuando salieron al mercado (“The Chance”, “Someone’s Crying”). Entonces se puede entender con mucha mayor facilidad melodías que, si no fuera por medio de auriculares o un buen sistema de audio, pasaron desapercibidas en su momento. Otro aspecto interesante es el de darle una nueva oportunidad a tracks que fueron vapuleados junto a sus álbumes originales, sea el caso de “Music” y “Step Out of Hell”, composiciones geniales del controversial y multifacético Chameleon (1993). O “Mankind” junto a las mencionadas “The Chance” y “Someone’s…” del, para algunos risible, Pink Bubbles Go Ape (1991).Considerando que el presente discográfico de HELLOWEEN deja qué desear, traer de regreso éstas canciones es algo muy saludable para los fans. Roland puso su impronta en varios de sus mejores temas, y del Power Metal en general. Redescubrir estos clásicos y otras gemas, como “Take Me Home” de Master of the Rings (1994), aplaca la sed de un futuro lanzamiento de estudio con mayor vuelo compositivo de los alemanes.Algunos podrán pensar que Rick Altzi no era el hombre indicado para poner la voz a estas canciones, pero la principal razón de que las mismas logren diferenciarse de sus pares originales se debe a él. Escucharlo desenvolverse con mucha dignidad frente a composiciones bautizadas por el inalcanzable Kiske lo hace merecedor de loas. Para las de la era de Deris, su voz no desentona debido a un menor contraste entre las 2, especialmente en “Escalation 666”, donde ambos vocalistas hicieron uso de su registro más grave.Si sos fanático de MASTERPLAN probablemente pienses que este disco es absurdo, y en parte estás en lo cierto. Con salir a tocarlas en vivo hubiera bastado. Pero si sos fanático de HELLOWEEN y te decepcionaste porque esperabas más, entonces relee los párrafos 3, 4 y 5. Hay que tomar a PumpKings como lo que es: un muy entretenido viaje nostálgico y personal de un guitarrista clave en la historia del Power Metal.Roger Alan ProvanColaborador en RocktambulosLa música, sin importar el género, popularidad, año o país de origen, tiene una chance en mis oídos. En ella encuentro mi camino.