A finales de los 90’s y principios del 2000, cuando -contra todo pronóstico- el metal se popularizó a través de un nuevo estilo que fusionaba la música pesada con el hip-hop, surgieron muchísimas bandas que hacían “lo mismo”, por decirlo de una manera reducida. El Nu Metal se convirtió en el género más popular del rock, copando las listas musicales durante toda una década gracias a bandas como KORN, LIMP BIZKIT, SLIPKNOT, o más tarde LINKIN PARK, que se convirtieron en principales representantes del género. NONPOINT es una de esas grandes bandas de nu-metal que no tuvieron tanta suerte y reconocimiento como los referentes del género, pero eso no significa que no tuvieran un éxito significativo, al menos en los Estados Unidos.

Los chicos de NONPOINT, oriundos de Fort Lauderdale, Florida, supieron destacar entre el resto apelando a sus raíces latinoamericanas, principalmente las de sus miembros fundadores, el vocalista Elias Soriano y el baterista Robb Rivera, y aunque no necesariamente incluyeron instrumentos latinos a su música -como hicieron algunas otras bandas- si aprovecharon la ventaja de hablar español para grabar un par de temas en nuestro idioma. Irónicamente, aunque varias de sus canciones sonaron en radio, la banda nunca visitó Latinoamérica en sus más de 20 años de carrera, ni siquiera México, cosa que si han hecho muchos de sus colegas nu-metaleros en todo este tiempo. ¿Será que nadie se atrevió nunca a invitarlos a cruzar la frontera estadounidense? ¿o tal vez habría que culpar a quienes los manejaban anteriormente, por no tener interés en el sur del continente?

Lo cierto es que su debut en suelo latino ocurre después de que el grupo ya no depende de nadie más que sí mismos, y es que NONPOINT fundó en 2021 su propio sello disquero, 361 Degrees Records, y publicó este 2023 su primer EP a través de él. Coincidencialmente su primer viaje al sur también ocurre este año, poniéndole fin a una larga espera por parte de quienes conocíamos a la banda en aquellos tiempos y nunca pudimos disfrutar en vivo de todo ese poder. La primera edición del festival Milenia, que -con o sin intención- reunió en un mismo lugar a bandas que triunfaron hace 20 años, hizo realidad este primer encuentro, ya que la banda no estaba de gira por la región. Su primer show en el sur ocurrió únicamente en Chile.

Puntuales a las 17hs, aparecieron en el escenario alternativo del festival los miembros de NONPOINT, todos vestidos de rojo (camisa, pantalón y accesorios) y desde el primer acorde de “Victim” la gente se activó con moshpits, circle pits y saltos. “¿Ustedes saben quiénes somos nosotros?” preguntó Soriano en completo español. “Bueno, si no saben y no saben leer (el backing tenía el nombre del grupo en tamaño gigante), nosotros somos KORN” bromeó el vocalista con su acento caribeño y la gente no paró de reír. La banda comenzó a tocar los acordes de “Blind” mientras Elias seguía insistiendo: “Somos KORN, de verdad, nosostros somos KORN”, un buen chiste para romper el hielo y dejar claro que no les importa que la gente los compare o los confunda, ya que ellos saben que su popularidad nunca ha sido ni cercana a la de los líderes del Nu Metal. Allí fue cuando preguntó nuevamente “¿Quienes somos nosotros?” y la gente gritó fuerte: “Nonpoint”.

Elias puso todo su esfuerzo en interactuar con el público utilizando su español mezclado con inglés, pero en la mayoría de los casos tuvo que recurrir a su idioma nativo. “Chi Chi Chi” gritó el vocalista al terminar “Chaos and Earthquakes”, en una demostración de interés por la cultura local, a lo que el público respondió con un contundente “Le Le Le”. “¿Quieren algo old school?” nos preguntó antes de tocar “What a Day”, pero nada como cuando preguntó si queríamos algo en español. El público sabía lo que venía y comenzó a corear “Rabia, rabia, rabia”. Y si, la banda nos deleitó con ese tema que ellos llaman “Spanish 102”, que no es otra cosa que dos canciones cantadas en español: “Rabia” y “Orgullo”.

“Es nuestra primera vez en Chile, y vamos a volver”, dijeron tanto Elias como Robb Rivera, quien desde su batería, posicionada de lado, no dejó de hacerse notar y hasta se levantó varias veces para bajarse y caminar al frente. “Volveremos con un set más largo, prometido” dijeron con su carismático spanglish antes de tocar “Ruthless” y cerrar con el más conocido de sus temas: “Bullet With A Name”.

A pesar de que nos quedamos con ganas de escuchar muchos otros temas (incluso había un chico con un cartel que pedía cantar con ellos “Alive and Kicking”), la banda supo aprovechar su tiempo al máximo y entregarnos once canciones enérgicas, en las que cada uno de los músicos demostraron su gran nivel, tanto musical como físico, porque no pararon de saltar, girar, correr y hacer headbanging o poses. Ni hablar de Elias Soriano y su impecable voz, pero sobre todo su constante conexión con la audiencia, siempre avivando a un público que ya estaba en llamas y no dejó de demostrar su entrega.

Lamentablemente el formato festival obliga a las bandas que no son headliners a tocar menos tiempo y en el caso de NONPOINT solo tuvieron 45 minuntos para su show, así que desde ya esperamos que cumplan esa promesa, no solo con un show más extenso sino con una gira que los lleve a otros países del continente. Mientras tanto, nunca olvidaremos esta primera vez.

Frank Hernández

Director en Rocktambulos

Escucho más de lo que veo y escribo más de lo que leo.
Periodista musical. Radio Host. Colaborador en Billboard y Rockaxis. Fundador de Rocktambulos