Música pesada contemporánea: PLAN 4 en el Teatro Flores. #Crónica

PLAN 4, una de las bandas más influenciadas tanto por lo que vino en los ’90 con Pantera como por los géneros clásicos del metal, se presentó el pasado sábado 8 de Octubre en el Teatro Flores, ¿el motivo? Ninguno en particular, el detalle de que en esta ocasión la lista de canciones estuvo en manos del público nos permite interpretar este show como un agradecimiento de la banda hacia su gente, fieles durante estos 13 años de carrera.

Desde temprano arrancó la música, los primeros en asomarse una vez abierto el telón fueron los muchachos de CORAL, la banda del venezolano Facundo Coral (ex Tren Loco y Paul Gillman) quienes frente a un recinto que se iba llenando muy de a poco intercalaron canciones de su primer álbum Arrecho (2014) y de su más reciente placa Thrash & Roll (2016). Con su Thrash Rutero, como a ellos les gusta llamarlo, el cuarteto satisfizo a quienes se acercaron a corear los temas conocidos y a recibir calidamente lo nuevo de su repertorio.

Más ajustados que la última vez en que tuve oportunidad de verlos, el conjunto que vino luego de CORAL es uno de los que, pareciera que de la noche a la mañana, se ha convertido en el exponente más claro del DeathCore/Djent en nuestro terruño, M28. A fuerza de tocar incansablemente estos muchachos se están haciendo con una sólida base de fans, esto se evidencia por la cantidad de personas que vitorearon y celebraron su performance en las tablas, casi no parecía que estuvieran viendo a una banda soporte sino al grupo por el cual pagaron la entrada.

El DeathCore es un fruto que todavía no está maduro en Argentina, son pocas las bandas de este estilo que resaltan por sobre el resto. M28 es uno de los precursores, y como tal, en el futuro es probable que sea reconocido como tal por parte de las bandas más destacadas del estilo. Los cuatro de La Plata se encuentran importando un género relativamente nuevo incluso a nivel mundial. En este proceso los primeros pasos siempre son los más difíciles, y aunque todavía nos encontramos muy lejos de poder alardear del buen nivel de nuestras bandas, en este género, el camino se está marcando de a poco.

Algo en lo que quiero hacer hincapié acerca de la noche del sábado es en la variedad de estilos que se vio entre las bandas teloneras. Quizás esta opinión no sea compartida por mucha gente, pero ¿hay algo más aburrido que tres bandas de Death Metal teloneando a una del mismo género? Claro que esto es solo un ejemplo, PLAN 4 no es Death Metal, pero quiero resaltar que lejos de querer ganarse a las masas con grupos del mismo estilo que la de Kanario Compiano, tanto ellos como la gente detrás de la organización sacaron al público de su zona de confort, lo cual siempre es una lotería, invitando a grupos ajenos al estilo de la protagonista, y en este caso el resultado fue más que positivo.

Hablando de variedad y heterogeneidad, la última banda antes de la principal fue MINORÍA ACTIVA, leyenda viviente del Buenos Aires Hardcore, quienes por un rato se adueñaron del escenario con la desfachatez que traen tantos años de estar en la escena. Los veteranos nos adelantaron un poco de Involución, el nuevo material que saldrá a fin de año, y hasta se dieron el lujo de tener Cristian Rodriguez y Fede Averno de AVERNAL como invitados en una versión acelerada de “Troops Of Doom” de Sepultura, ¿acaso ya dije que se adueñaron del escenario? No sería la primera vez que los de Brasil fueran homenajeados aquella noche, pero no nos adelantemos.

Ahora si, el plato fuerte. Con un Teatro Flores ya colmado de jóvenes y no tan jóvenes metaleros Kanario y sus compadres salieron a escena y complacieron a sus seguidores. Siguieron al pie de la letra las 22 canciones más votadas por su gente. De todas las épocas, sobre todo cuando la banda recordó viejas épocas junto con Fernando “Oso” Santacroce tocando temas de RAÍZ, y para todos los gustos, en un popurrí de covers que incluyó “Somebody Put Something In My Drink”, “Walk” y “Roots Bloody Roots”. A la banda se la notó visiblemente feliz. No hay mejor celebración que la que se hace de manera espontánea, sin la formalidad de la presentación de un álbum o cosas por el estilo, sin desmerecer ese tipo de ocasiones, claro.

¿Algo para reprochar de la noche del sábado? El sonido, recién cuando PLAN 4 tomó el control fue que la cosa se volvió más o menos escuchable, antes el volumen estaba demasiado alto y hasta costó mucho comprender lo que decía Moncho, vocalista de Minoría Activa, entre canciones.

Hubo pogo en absolutamente todos los momentos en los que las canciones lo ameritaban, y gracias al intercambio de energía que hubo entre banda y público, aún después de una hora y media de show todos parecían lo suficientemente enérgicos como para seguir un par de horas más. Un show de PLAN 4 es todo lo que uno imagina que puede ser un recital de metal.

Leonardo Rodríguez Luque