El terror llegó al anochecer: TERRORES NOCTURNOS se presentó a casa llena en Uniclub #ReseñaReseñasShows (Así Fue) por Nicolás Rodríguez - 14/10/202515/10/2025 Buenos Aires volvió a latir anoche con TERRORES NOCTURNOS ante una sala llena, con localidades agotadas y un público que no paró de saltar, cantar y abrazarse en Uniclub. En una hora y veinte de show, recorrieron toda su discografía, mezclando la furia de los primeros temas con la madurez musical del nuevo material.La noche del 10 de octubre fue la presentación oficial en vivo de Gente en la Ventana, su segundo disco de estudio, lanzado el pasado 3 de septiembre. Pero más que un estreno, se sintió como un reencuentro, una celebración de casi una década de recorrido. La banda, con Marcos Aramburu en voz y guitarra, Sebastián Limarino en bajo, Julián Pérez en batería, Juan Verona en teclados y Santiago Napoli como guitarrista invitado, desplegó un set de 17 temas.Desde el arranque con “Malas Noticias” hasta el cierre con “Terrores Nocturnos”, el grupo trazó una línea que une sus inicios más punk con la sensibilidad que hoy define su sonido. En el medio, hubo pogo, emoción y una comunión genuina entre banda y público. “Gente en la Ventana” y “Contra el Barro” fueron el punto más alto: el piso tembló, las rondas se multiplicaron y el calor humano transformó el club de Abasto en un pequeño ritual. Formados en 2017, TERRORES NOCTURNOS se consolidó en medio de una escena under en ebullición, un movimiento que después de la pandemia se multiplicó por bares, clubes y espacios culturales de todo el país. Mientras muchos grupos surgieron y desaparecieron con rapidez, ellos nunca se separaron ni se refugiaron en el silencio, sino que continuaron tocando, grabando canciones y afianzando una identidad propia, construida sobre la mezcla del punk con letras que reflejan tanto lo urbano como lo emocional.Gente en la Ventana, además de recorrer su historia musical, incluye colaboraciones destacadas que muestran la amplitud de su propuesta, como la presencia de Santiago Motorizado, ícono del nuevo rock indie argentino, y la participación de un clásico del punk nacional, EXPULSADOS, quienes aportan un guiño a la historia del género. La combinación de estas colaboraciones con la energía y sensibilidad propia de la banda consolida un sonido reconocible al instante y que dialoga de manera inteligente con la escena contemporánea.El momento más íntimo del show llegó con “Motomensajero”. Esa canción, que tradicionalmente suele interpretar Marcos “Cuarti” Delfino, guitarrista habitual del grupo, esta vez estuvo a cargo de Marcos Aramburu como voz principal mientras el resto de la banda y el público hacían coro. Sin embargo, Cuarti se hizo presente por videollamada, saludando entre risas. Durante el show, como reemplazo sobre el escenario estuvo Santiago Napoli, que —según contó Marcos entre tema y tema— tuvo que aprenderse todo el repertorio en un solo día. Aun así, su presencia fue impecable.Sin banda soporte ni invitados, el quinteto se sostuvo por sí solo, con una puesta visual en la que también participaron Juan Sahagvian y Conrado Delfino, responsables de la creación del mundo audiovisual que hace destacar a la banda. Luces cálidas, proyecciones simples e imágenes de la ciudad en moto. Del mismo modo, el arte de tapa de Gente en la Ventana dialoga con esa poética: la tensión entre lo que se ve y lo que se oculta atraviesa tanto las canciones como los videos del disco. Con esa estética, TERRORES NOCTURNOS logra construir una identidad propia, reconocible incluso antes de sonar la primera nota.Durante “Remises Truchos” y “Semáforos”, la gente cantaba cada palabra, levantaba los brazos y se abrazaba con quienes tenía cerca, compartiendo la energía de la música. Cada tema hacía que la sala se sintiera más unida, como si todos los asistentes formaran parte de un mismo grupo. Cuando sonó “V.L.T.”, las rondas de saltos y gritos se multiplicaron por todo Uniclub y la banda respondió devolviendo la energía en cada bis del estribillo. El entusiasmo del público no bajó ni un segundo, y todos colaboraron para que la noche mantuviera un ritmo constante y contagioso.La despedida llegó entre aplausos y promesas. “Nos vemos en Ballester y en Flores”, anunció Aramburu, anticipando las próximas fechas en Buenos Aires: el 31 de octubre junto a Nina Suárez en el Club de la Música, y el 29 de noviembre en el Teatro Flores junto a MASSACRE.En tiempos donde el rock busca constantemente su lugar, TERRORES NOCTURNOS demostró que lo suyo ya está definido: entre la furia y el abrazo, entre el ruido y la risa, sigue siendo un espacio seguro para emocionarse y sentirse parte de algo colectivo. ©Todas las fotos fueron tomadas por Nicolás Rodriguez para Rocktambulos / Todos los derechos reservados