El lado amable: THE MIGHTY MIGHTY BOSSTONES enmendó su deuda con Buenos Aires

Lejos de las letras con contenido social como las del primer ska inglés de mediados de los años 70, y también lejos de la furia adolescente, que fue un elemento a combinar por bandas de la misma camada que los protagonistas de esta nota –como Operation Ivy-, THE MIGHTY MIGHTY BOSSTONES apunta por un punk más melódico y menos controversial, es decir que nunca se dedicaron a patear recipientes de basura para llamar la atención. Se presentaron por primera vez en Argentina el pasado Martes 9 de Agosto en Groove, en el marco de un histórico Kick Fest.

Con un recinto que se fue llenando muy de a poco la música arrancó de la mano de SOMBRERO CLUB, ESPIAS y ASESINOS CEREALES. 2 Tone, mezclado con un poco más de reggae o un poco más de punk, todas rinden tributo a la música que hace bailar a los muertos.

Alineados los planetas y sin sufrir los inconvenientes de audio por los que si tuvieron que pasar las bandas teloneras, THE MIGHTY MIGHTY BOSSTONES salió a escena a la hora pactada y no se guardó nada. A pesar de que los muchachos -o señores- no cuentan con tanto material comercial, o por lo menos con tantos hits, como para sostener un show de tan larga duración, en lugar de ir de menor a mayor decidieron tirar todas las bombas para el comienzo: “The Rascal King”, “Everybody’s Better”, “Where’d You Go?” tres de los hits que los pusieron en el radar del mainstream sonaron temprano, no sin antes Dicky Barrett, su frontman pedir disculpas y hacerse responsable de haber tardado 25 años en visitar esta parte del continente.

Cualquier vestigio de rencor que pudo haber quedado para con los músicos seguro se vino abajo después de la clase de Ska que estos experimentados señores dieron. Si de algo sirve la experiencia, es para dar shows como el que se vivió el martes por la noche: tocando hasta cuatro canciones seguidas antes de que Dicky -también conocido fuera del ambiente por ser el presentador del programa de Jimmy Kimmel- interviniera para charlar con el público. Se nota que la música no es lo único tomado de la escuela Ramonera.

¿Qué queda cuando al Ska le quitamos su concientizador mensaje, el cual en su momento fue tan importante como la música, y al Punk la descarga de furia catártica? Canciones divertidas, prolijas, para bailar y que apuntan a un público amplio. Es por eso que dentro de Groove podían verse personas de cualquier edad, Rude Boys, Rude Girls, Punks, uno que otro Skinhead o gente sin ninguna estética relacionada con algún estilo musical.

Dedicando unas palabras a cuán importante es apoyar la escena local, agradeciendo a las bandas que sirvieron de apertura y dedicando canciones a lo más importante en el mundo: la amistad y el amor, THE MIGHTY MIGHTY BOSSTONES hicieron bailar, en un show mucho más largo de lo que me esperaba, a las alrededor de 2000 personas que entienden cuan importante fue esta banda en su momento, aunque también demostraron que aún le quedan tiros en el tambor.

Habiendo hecho un cover de “Simmer Down” de The Wailers, otro de “Rudy Can’t Fail” de The Clash -que, por cierto, no le hace justicia a la obra de Joe Strummer-, guardando “The Impression That I Get” para el final e incluso estrenando “Muhammad Alí“, su nueva canción, THE MIGHTY MIGHTY BOSSTONES sigue su camino.

Lejos de los días de gloria en los que su música resaltaba dentro de un género que se ve agotado hace años, ellos siguen tocando, girando, dando shows a la altura y por sobre todo, divirtiéndose y divirtiendo a su público.

Leonardo Rodríguez Luque