Los ya veteranos del rock neoyorkino, INTERPOL, marcaron el segundo día del Lollapalooza Chile 2019.

Paul Banks y compañía interpretaron un set en el que repasaron sus casi 20 años de carrera, así como también temas de su más reciente álbum Marauder. Temas como “C’ mere”, “If you really nothing”, “PDA”, “Evil”, “Rest my chemistry” y muchas más, se escucharon el sábado en el Parque O’Higgins.

Tras la sobriedad de INTERPOL, se dio pasó a la irreverencia del rapero Post Malone. El fenómeno neoyorkino fue uno de los shows más esperados de la jornada, y comenzó su presentación con el tema “Zack and codeine”.

Malone se mostró amigable con el público chileno, que no dejaba de corear sus canciones, entre las que destacan: “Too Young”, “Better now”, “Psycho”, “Rockstar”.

El cierre de la jornada estuvo a cargo de TWENTY ONE PILOTS, quienes entregaron un show potente y cargador de buena energía. Tayler y Josh abrieron sus presentaciones con los temas “Jumpsuit” y “Levitate”.

Uno de los momentos más emocionantes se vivió cuando el vocalista Tyler invitó a hacer el left right dancer, el cual consiste en hacer saltar a los guardias de seguridad y al público al mismo tiempo.

Más temprano, fue el turno de PORTUGAL THE MAN, quienes arrancaron su presentación con un homenaje a METALLICA y PINK FLOYD. Su show estuvo lleno de mensajes políticos.

El fundador del Lollapalooza, Perry Ferrell, fue condecorado con la Orden al Mérito Artistico y Cultural Pablo Neruda.

En el VTR STAGE se presentó BRING ME THE HORIZON, quienes no visitaban Chile desde hace 3 años. El show arrancó con “Mantra”, tema extraído de su más reciente disco.

Pese a las críticas que la banda ha recibido por su notable cambio de estilo, el vocalista Oli Sykes intentó hacer frente a esto y demostrar que la banda no ha cambiado su esencia, y durante toda la presentación invitaba al público a formar un mosh pit.

La banda dio un repaso a sus temas más conocidos como “Shadow moses”, “Drown” y «Medicine”, para cerrar con “Throne”.

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