TESSERACT en Argentina: Un debut que alteró nuestros estados #Reseña

Este 2023 nos sigue trayendo figuritas difíciles a la Argentina. En apenas tres meses que van del año ya hemos visto el debut de SWALLOW THE SUN, luego el de PERSEFONE y ahora tuvimos el gusto de presenciar el esperado estreno de TESSERACT en estas tierras (que de paso coincidió con otro debut, el de DARKANE).

La visita de la banda británica de metal progresivo era una deuda pendiente, no solo porque en sus 20 años de carrera el grupo nunca había tocado en el país sino porque el show fue suspendido y reprogramado varias veces por culpa de la pandemia. Originalmente estaba pautado para 2020, así que muchos de los fans guardaron su entrada como un tesoro durante años, algo que sin dudas tuvo su premio ya que lo que vivimos el pasado 28 de marzo en Buenos Aires fue una experiencia inolvidable.

Aunque las puertas se abrieron varios minutos tarde y todas las bandas se retrasaron, todo eso se olvidó cuando comenzó a tocar la primera banda de la noche, PLEIA. El retraso benefició en cierto modo a las agrupaciones soportes ya que para cuando se subió al escenario el primer grupo ya el lugar tenía una cantidad de público considerable, y para cuando comenzó la segunda, KOBAL, ya estaba casi lleno.

Tanto PLEIA como KOBAL entregaron un gran set ante un público que se notaba bastante emocionado y listo para disfrutar de buena música progresiva, por lo que supieron apreciar las propuestas de ambas teloneras, que por su estilo musical, tuvieron bastante afinidad con los presentes. PLEIA es un virtuoso trío -o tres tristes tios, como ellos mismos se definen- conformado por músicos venezolanos radicados en Argentina, y para esta fecha contaron un cuarto integrante, el bajista venezolano Enrique Perez Vivas (MOJO POJO). La banda desplegó su virtuosismo sobre el escenario de El Teatrito y demostró porqué son una de las gratas sorpresas de la movida local, ya que a pesar de todavía no tener un disco publicado (apenas un par de sencillos) han dejado muy buena impresión a quienes han podido escucharlos en vivo y esta vez no fue la excepción. El próximo 18 de abril van a estar abriendo para CYNIC en Buenos Aires, fecha para la cual estamos regalando una entrada y para participar solo tienes que seguirnos en instagram (entra acá para más info).

Luego vino el turno de KOBAL, otro trío de metal pero esta vez más alternativo, con un sonido en el que se podían percibir distintas influencias. Algunos de los temas que pudimos escuchar tenían una notable esencia djent mientras que otros tenían un aire más numetal. Supieron calentar los motores ante un teatrito lleno y pusieron a más de uno a mover la cabeza gracias a sus poderosos riffs. Cabe destacar que el volumen estuvo alto, permitiéndonos apreciar con claridad la detreza instrumental del grupo bonaerense, algo que no es común en las bandas soporte (suelen bajarles el volumen) así que punto para el sonidista que hizo que las encargadas de abrir la jornada sonaran con el poder que merecían.

Con aproximadamente 15 minutos de retraso comenzó lo más esperado de la noche, lo que todos habían venido a ver y nos mantenía a muchos a la expectativa. ¿Por qué tanta expectativa? porque en el papel (o mejor dicho, en el disco) TESSERACT es perfecta, pero lo que hacen es un sonido muy complejo, con patrones rítmicos poco comunes, difíciles de emular y canciones cuyo registro vocal es sumamente exigente, así que las posibilidades de que en vivo esto no pudiera ser reproducible siempre son altas. Veamos qué paso.

Desde el momento en que sonaron los primeros acordes de «Of Matter – Proxy», el teatrito enloqueció. Y no es para menos, ya que es uno de los temas más populares de la banda. El setlist inició con la poderosa triada Of Matter: «Proxy» – «Retrospect» – «Resist» y allí tuvimos el primer momento épico de la noche, que llegó específicamente cuando Daniel Tompkins, vocalista, dejó que la gente cantara el emotivo «I know/I’ve hoped», frase clave al final de «Retrospect», y todo el público se unió para cantar junto con él, haciendo retumbar el recinto. Momento solo comparable con el que ocurriría hacia el final del show, cuando llegó el turno de «Of Mind – Nocturne», el más popular de los temas que ha grabado la banda, y que también forma parte de su obra cumbre, el disco Altered State.

Es interesante que hayan decidido iniciar el show con ese triple tema ya que forma parte del único disco en el que no participó Tompkins, por lo que probablemente signifique un reto mayor para él interpretar esas canciones. Eso sí, desde el punto de vista de enganchar con el público, son un tiro al piso y quedó demostrado esa noche cuando todo el sector delantero comenzó a saltar y gritar al escucharlos.

Pero no solo los momentos de conexión musical hicieron de este un show memorable, sino también los de conexión física. La actitud y entrega de la banda es notable a pesar de ser bastante sobrios, pero esa aparente sobriedad no impidió que durante la canción «Dystopia», el vocalista bajara de la tarima para cantar en el vallado mientras los fans lo tocaban, abrazaban y cantaban junto a él. Estos momentos siempre ofrecen una conexión única entre la banda y los fans.

A pesar de que la banda no habló mucho con el público, la comunicación fluía constantemente a través de los gestos y movimientos de cada uno de los músicos, amén de la complicidad entre Tompkins y los fans al momento de cantar ciertas partes de las canciones. Por supuesto, hubo tiempo para corear «Tesseract, Tesseract» varias veces, mostrando el amor que se tiene por la banda en estos lares.

«¿Quieren escuchar un tema nuevo?» preguntó Daniel, después de habernos deleitado con otra gran triada de canciones conceptuales, como lo son Concealing Fate: «Acceptance» – «Deception» – «The Impossible», todas de One, el disco debut de TESSERACT. El público dijo que si, obviamente, y allí nos presentó «Natural Disaster», su más reciente sencillo y ordenó: «Cuando el riff suene ustedes hacen headbangin'», un pedido especial que el público -en su mayoría- cumplió a cabalidad.

Con «King» y la super esperada «Of Mind – Nocturne» nos acercabamos al final del show, así que después de tocar «Juno», la banda se fue del escenario. Los fans ni se movieron y de inmediato corearon el clásico «una más y no jodemos más» así que unos minutos más tarde la banda volvió al escenario para tocar dos canciones más, la dupla «Concealing Fate: Perfection» y «Concealing Fate: Epiphany», dando así un mágico y poderoso cierre a la noche, en la que solo faltó escuchar «Concealing Fate: Origin» para completar esa épica canción de más de 27 minutos.

Antes del inicio del show me preguntaba si iban a ser capaces de sonar como lo hacen en los discos, y la verdad es que me sorprendieron al demostrar que si. Obviamente, no son un calco al carbón, sobre todo en lo que a voz se refiere y es que después de todo, muchos de los temas más populares del grupo fueron grabados por el vocalista Ashe O’Hara, y por más que Daniel Tompkins sea un increíble cantante, su voz no va a sonar como la de otra persona. Sin embargo, salvando las diferencias, el trabajo que realiza Tompkins es impecable y admirable, ya que no solo destaca en sus agudos y sus guturales sino que también demuestra una contagiosa energía en el escenario.

Al terminar el show, la banda se quedó unos minutos en el escenario, regaló cosas, saludó y se tomó la foto correspondiente. La mayor sorpresa fue ver la hora y darse cuenta que solo habían pasado 1 hora y 20 minutos. Aunque pueda parecer un show corto, fue tan intenso y contundente que parecía que habían tocado durante dos horas. Además, el setlist fue tan completo que estoy seguro que todos los presentes quedaron satisfechos con este debut, que no solo fue esperado sino exitoso. Esperamos con ansias ese nuevo material que, si todo sale bien, debería salir a mediados de este 2023 y -por supuesto- ya queremos que vuelvan.

Frank Hernández